Virtud citas y frases
La humildad es una virtud, y es una virtud innata en los huéspedes.
Trata de mantener tu alma siempre en paz y en tranquilidad, siempre lista para lo que nuestro Señor quiera trabajar en ti. Sin duda es una gran virtud del alma, y una mayor gracia, ser capaz de disfrutar al Señor en distintos momentos y en diferentes lugares y no solamente en uno.
Buen gobierno es el resultado de la virtud privada.
En este mundo, compañeros, el pecado que paga a su manera puede viajar libremente y sin pasaporte; mientras que la virtud, como si fuera un mendigo, es detenida en todas las fronteras.
El hombre no puede ser elevado; debe ser seducido hacia la virtud.
La humildad no es algo que viene naturalmente. Pero es una virtud cardinal que se debe buscar más que cualquier otra.
La reputación raramente se proporciona a la virtud.
Toda virtud se resume en tratar justamente.
La precisión es a un periódico lo que la virtud es una dama; pero un periódico siempre puede imprimir una retracción.
Todo el mundo cree en algo y todo el mundo, en virtud del hecho de que creen en algo, usan ese algo para apoyar su propia existencia.
No hay ningún crédito en no hacer lo que no quieres hacer. No hay ninguna virtud en no caer, cuando no estás tentado.
La virtud es armonía.
La virtud de la justicia consiste en moderación, según como la regula la sabiduría.
La puntualidad es la virtud de los aburridos.
¿Qué es la virtud sino el sindicalismo de los casados?.
La virtud consiste, no en abstenerse del vicio, sino en no desearlo.
Espero que tenga la firmeza y la virtud suficiente para mantener lo que considero el más envidiable de todos los títulos, el carácter de un hombre honesto.
El verdadero coraje no es la fuerza brutal de héroes vulgares, pero el firme propósito de la virtud y de la razón.
El vicio es su propia recompensa. Es la virtud, si se ha de comercializar con atractivo para el consumidor, la debe llevar sellos de escudo verde.
Si uno tiene una buena disposición, ¿qué otra virtud se necesita? Si un hombre tiene la fama, ¿cuál es el valor de los adornos de los otros?