Citas de Pierre Teilhard de Chardin
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Seguramente la estela dejada por la marcha hacia adelante de la humanidad revela su movimiento apenas tan claramente como el aerosol lanzado por la proa en otros países.
Nada puede resistir a la persona que le sonríe a la vida — no me refiero a la sonrisa irónica y desilusionada de mi abuelo, sino la sonrisa triunfante de la persona que sabe que él sobrevivirá, o que por lo menos se salvará de lo que parece que lo está destruyendo.
El hombre puede ser entendido solamente por la ascensión de física, química, biología y geología. En otras palabras, él es ante todo un problema cósmico.
Pasamos nuestra vida, todos nosotros, esperando el gran día, la gran batalla, o la cesión del poder. Pero esa esperanza externa no le es otorgada a muchos, aunque tampoco es necesaria. En la medida en que nuestro ser se pone tenso, se dirige con pasión hacia aquello que conforma el espíritu de todas las cosas, en esa medida ese espíritu surgirá de nuestro propio esfuerzo oculto y anónimo.
Solo el amor es capaz de unir a los seres vivos de modo que los completa y los satisface, pues solo él los lleva y los une mediante lo más profundo dentro de ellos.
Somos uno, después de todo, tú y yo, juntos sufrimos, juntos existimos, y por siempre nos recrearemos el uno al otro.
En cierto modo, el universo entero tangible es un gran residuo, un esqueleto de innumerables vidas que han germinado en ella y la han dejado, dejando tras de sí sólo una parte insignificante, infinitesimal de sus riquezas.
El amor es una aventura y una conquista. Sobrevive y se desarrolla, como el universo mismo, sólo por descubrimiento perpetuo.
Debo lo mejor de mí a la geología, pero todo que me ha enseñado tiende a alejarme de las cosas muertas.
La humanidad, el espíritu de la tierra, la síntesis de los individuos y los pueblos, la paradójica conciliación del elemento con el todo y de unidad con la multitud — todos estos son llamados utópicos, y sin embargo son biológicamente necesarios.
A la temperatura extrema que hay en las estrellas, la materia solo puede sobrevivir en sus estados más disociados. Sólo los cuerpos simples existen en estas estrellas incandescentes.
La humanidad sigue avanzando; y probablemente seguirá avanzando por cientos de miles de años más, siempre a condición de que sepamos cómo mantener la misma línea de avance que nuestros antepasados, cada vez hacia una mayor conciencia y complejidad.
Un sentido del universo, un sentido del todo, la nostalgia que se apodera de nosotros cuando se enfrenta con la naturaleza, la belleza, la música. Esto parece ser una expectativa y la conciencia de una Gran Presencia.
En el análisis final, las preguntas del por qué las cosas malas le pasan a la gente buena se transmutan en otras preguntas muy diferentes que ya no preguntan por qué ocurrió algo, sino que preguntan cómo responderemos, lo que pretendemos hacer ya que ha sucedido.
Algún día, después de dominar los vientos, las olas, las mareas y la gravedad, vamos a aprovechar para Dios las energías del amor, y entonces, por segunda vez en la historia del mundo, el hombre habrá descubierto fuego.
