Citas de Charles Caleb Colton
La moderación es la compañera inseparable de la sabiduría, pero con ella el genio ni siquiera asiente la cabeza para saludar.
El comercio florece por las circunstancias precarias, transitorias, contingentes, casi como los vientos y las olas que lo trae a nuestras costas.
El poder intoxicará a los mejores corazones, como el vino a las cabezas más fuertes. Ningún hombre es lo suficientemente sabio, ni lo suficientemente bueno para ser confiado con poder ilimitado.
El mejor amigo de la verdad es el Tiempo, su peor enemigo es el perjuicio, y su compañero fiel es la humildad.
El estudio de las matemáticas, como el Nilo, se inicia en la pequeñez pero termina en la magnificencia.
Nuestros ingresos deben ser como nuestros zapatos; si son demasiado pequeños, nos pincharán y mortificarán; pero si son demasiado grandes, nos harán trastabillar y tropezar.
La felicidad, esa gran amante de las ceremonias en la danza de la vida, nos impulsa a través de sus laberintos y meandros, pero no nos lleva a ninguno de nosotros por el mismo camino.
Las actividades benéficas póstumas son la misma esencia del egoísmo cuando son legadas por aquellos que, aún vivos, partirían sin nada.
Ese escritor hace lo máximo quién da a su lector el mayor conocimiento y toma de él el menor tiempo.
Ninguna empresa es preferible al mal. Somos más propensos a adoptar los vicios de los demás que las virtudes, como la enfermedad es mucho más contagiosa que la salud.
Hay tres dificultades en la autoría: escribir algo digno de publicar, encontrar hombres honestos que lo publiquen y encontrar hombres sensatos para leerlo.
La duda es el portal a través del cual todos deben pasar antes de que puedan entrar al templo de la sabiduría.
Siempre es seguro aprender, incluso de nuestros enemigos; rara vez, es seguro aventurarse a instruir, incluso a nuestros amigos.
La muerte es la liberadora de quienes la libertad no puede liberar, el médico de quienes la medicina no puede curar y el consolador de aquellos a quienes el tiempo no puede consolar.