Victoria citas y frases
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El primer paso en el camino hacia la victoria es reconocer al enemigo.
La victoria les pertenece a los más perseverantes.
La paz es la belleza de la vida. Es el brillo del sol. Es la sonrisa de un niño, el amor de una madre, la alegría de un padre, la unión de una familia. Es el adelanto del hombre, la victoria de una causa justa, el triunfo de la verdad.
La violencia como forma de lograr la justicia racial es impráctica e inmoral. No niego hecho de que la violencia muchas veces produce resultados momentáneos. Naciones frequentemente han ganado su independencia en batalla. Pero a pesar de las victorias temporales, la violencia nunca produce una paz permanente.
Es mejor liderar desde atrás y poner a otros en el frente, especialmente cuando usted celebra la victoria cuando ocurran cosas buenas. Tome el frente cuando haya peligro. Entonces la gente apreciará su liderazgo.
La victoria se gana no en millas, sino en pulgadas. Gana un poco ahora, mantén tu posición y después, gana un poco más.
Hay victorias del alma y el espíritu. A veces, incluso si pierdes, ganas.
Es en el entusiasmo irresistible de la aventura elevada y de la victoria, y en la acción creativa, en lo que el hombre encuentra sus alegrías Suprema.
La conquista propia es la más grande de las victorias.
Para lograr victoria en la vida, tenemos que mantenernos enfocados en la meta y la meta es el Cielo.
Uno puede saber cómo obtener una victoria y no saber como usarla.
No necesito la banda del capitán para dirigir un equipo a la victoria.
Siempre encuentro a las modelos de Victoria Secret un poco raras.
La primera y mejor victoria es conquistarte a ti mismo; ser conquistado por ti mismo es la cosa más vergonzosa y vil.
El tiempo se está acortando. Mas cada día que desafío a este cáncer y sobrevivo es una victoria para mí.
La guerra es una serie de catástrofes que resultan en victoria.
Constrúyeme a un hijo, oh Señor, que será lo suficientemente fuerte para saber cuándo es débil y bastante valiente para enfrentarse a sí mismo cuando tiene miedo, uno que se sentirá orgulloso y desplegante en el derroto honesto, y humilde y apacible en la victoria.
La historia demuestra que cuando la ética y la economía entran en conflicto, la victoria siempre la lleva la economía. Nunca se ha sabido que los intereses investidos se hayan liberado voluntariamente, a menos que hubiera fuerza suficiente para obligarlos a hacerlo.
Jugar con los amigos es una victoria.
No hurto la victoria.