Racismo citas y frases
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El racismo, antisemitismo, homofobia, sexismo, cualquier cosa Nazi y una gran cantidad de otras cosas no tienen lugar en mi vida.
Ninguna raza tiene el monopolio sobre el racismo.
Hay que luchar contra el racismo, no hay ninguna otra alternativa.
Creo que el patriotismo nunca es racismo.
En Estados Unidos hay un racismo institucional que heredamos y del cual todos participamos, como respirando el aire en esta sala — y tenemos que volvernos sensibles a él.
El racismo es lo que absolvió a O. J. Simpson.
Siempre he estado muy preocupado por el hecho de que el darwinismo le dio el visto bueno al terrible racismo y a la idea de asesinato basado en la raza.
Deberías leer la historia y mirar el ostracismo, la persecución, el martirio y ese tipo de cosas. Sabes, siempre le suceden a los mejores hombres.
Durante la década de 1960, muchos de nosotros creíamos que el Movimiento de los Derechos Civiles podía eliminar el racismo en los Estados Unidos durante nuestra vida. Pero a pesar de los avances significativos, el racismo continúa.
No perdono el racismo. No perdono el prejuicio.
Las virtudes cristianas unen a los hombres. El racismo los separa.
Del mismo modo en que el racismo es el problema de una persona blanca, la violencia contra las mujeres es un problema de hombres.
Si sólo Al Sharpton hubiese estado en ese entonces, Lincoln hubiera sabido que fue víctima de racismo.
Detesto el racismo, porque lo considero como algo bárbaro, tanto cuando viene de un hombre negro como de un hombre blanco.
El racismo esta todavía con nosotros. Pero nos toca preparar a nuestros hijos para lo que tienen que enfrentar, y ojalá, lo que podremos vencer.
El racismo, la xenofobia y la discriminación injusta han dado lugar a la esclavitud, cuando los seres humanos han comprado y vendido y poseído y marcado seres humanos semejantes como si fueran tantas bestias de carga.
El aborto y el racismo son síntomas de un error humano fundamental. El error es pensar que cuando alguien se interpone en el camino de nuestros deseos, podemos justificarlo sacando a esa persona de nuestras vidas. El aborto y el racismo se derivan de la misma raíz venenosa: el egoísmo.
El racismo nace de la mentira de que ciertos seres humanos son menos que plenamente humanos. Es una mentira egocéntrica que corrompe nuestras mentes, haciéndoles creer que es justo tratar a los demás como no nos gustaría ser tratados.
Las policías o los soldados son sólo un arma en la mano del establecimiento. Hacen que el racista sea seguro en su racismo.
Como digo a menudo, hemos recorrido un largo camino desde los días de la esclavitud, pero en 2014, la discriminación y la desigualdad todavía saturan nuestra sociedad de formas modernas. Aunque el racismo es ahora menos descarado, en muchos casos, su existencia es innegable.
