Juicio citas y frases
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La conciencia de un hombre y su juicio son lo mismo; y como el juicio, así también la conciencia, puede ser errónea.
Mi infancia comenzó, como la infancia de todo el mundo comienza, con prejuicios. Las persona encuentran prejuicios al lado de su cuna, le ponen un poco en el curso de su carrera y a menudo, ¡por desgracia! la llevan de nuevo en su vejez.
Si amamos a Dios, hacemos Su voluntad y tememos a su juicio más que al de los hombres, tendremos autoestima.
Espero que podamos aplastar la cuna de la aristocracia de nuestras corporaciones adineradas que se atreven a desafiar a nuestro gobierno a un juicio por la fuerza, y declarar la resistencia a las leyes de nuestro país.
A falta de juicio se presenta un gran daño, pero un voto emitido puede rectificar una casa.
Creo que la mayoría de las personas son más susceptibles a los prejuicios que a la razón.
La buena salud y el buen juicio son dos de las más grandes bendiciones de la vida.
No es hasta que te conviertes en madre que tu juicio poco a poco se convierte en compasión y comprensión.
El sentido común es la colección de prejuicios adquiridos hasta la edad de dieciocho.
El prejuicio es tremenda forma de ahorrar tiempo. Se pueden formar opiniones sin tener que conocer los hechos.
Tu representante te debe, no sólo su industria, sino también su juicio; y te delata en vez de servirte si él lo sacrifica para tu opinión.
Esto no es un juicio. Esto es un linchamiento. No hay ley.
La universidad es un refugio en contra del juicio precipitado.
El gobierno, a mi juicio, no puede crear dinero; el gobierno puede dar sus pagarés, como un individuo, y la perspectiva de su pago determina su valor.
Soy libre de todos los prejuicios. Odio a todos igualmente.
El miedo, el prejuicio, la malicia y el amor de aprobación sobornan a mil hombres donde el oro soborna a uno.
La gente extremadamente religiosa y legalista tiene una crítica o juicio sobre todos y todo. Sólo poseen una manera de derribar a la gente con lo que dicen.
En cuanto a nosotros mismos, sí, debemos ser mansos, soportar la injusticia, la maldad, el juicio impulsivo. Debemos dar la otra mejilla, renunciar a nuestro capa, ir una segunda milla.
El descubrimiento de la verdad se evita con más eficacia, no por la falsa apariencia que presentan las cosas, que inducen al error, no directamente por la debilidad de las facultades de razonamiento, sino por una opinión preconcebida, por prejuicios.
Muchos que viven merecen la muerte. Y algunos que mueren merecen la vida. ¿Puedes dásela a ellos? Entonces no seas demasiado ansioso en impartir la muerte en juicio. Porque incluso, los muy sabios no pueden ver todos los fines.