Citas de Albert Camus

Nos volvemos hacia Dios sólo para obtener lo imposible.

El día que sólo sea escritor, dejaré de ser escritor.

Todo hombre y, por razones más fuertes, todo artista, quiere ser reconocido. Yo también.

Gobernar quiere decir saquear, como todos saben.

Cada vez que alguien hable de mi honestidad, hay alguien que tiembla dentro de mí.

La violencia es inevitable e injustificable.

Yo no estoy hecho para la política porque yo soy incapaz de desear o aceptar la muerte del adversario.

Extraigo del absurdo tres consecuencias: mi rebelión, mi libertad, mi pasión.

El único artista realmente comprometido es aquel que, sin negarse a tomar parte en el combate, por lo menos se niega a unirse a los ejércitos regulares y sigue siendo un independiente.

Todo artista conserva profundamente dentro de sí, una fuente de la que, durante toda su vida, extrae lo que es él y lo que dice. Cuando la fuente se seca, el trabajo se marchita y se desmorona.

Consciente de no poder separarme de mi tiempo, he decidido a formar parte de él.

El papel del intelectual no puede ser excusar la violencia de un lado y condenar la del otro.

No esperes al juicio final; éste se lleva a cabo todos los días.

Para asegurar la adoración de un teorema por cualquier longitud del tiempo, la fe no es suficiente; se necesita también una fuerza policial.

Llamamos primeras verdades a las que descubrimos después de todas las demás.

¡Qué duro y qué amargo es convertirse en un hombre!

El hombre es una idea y una idea pequeña preciosa una vez que da la espalda al amor.

No les creas a tus amigos cuando te pidan que seas honesto con ellos. Lo que realmente quieren es mantener una buena opinión sobre sí mismos.

¿Cómo puede la sinceridad ser una condición de la amistad? Un gusto por la verdad a cualquier costo es la pasión que no perdona nada.

Para existir sólo una vez en el mundo, es necesario nunca volver a existir.