Semana citas y frases
(página 2)
Leo un libro a la semana. Intento mantener mi mente trabajando.
Yo diría que el 80 % de los papeles que me ofrecen no son dramas ni comedias románticas, lo que es es curioso porque eso es lo que hago cada semana.
Nunca en mi vida me he encontrado en una situación donde haya parado el trabajo y haya dicho "Gracias a Dios es viernes". Sino que los fines de semana son especiales, aunque el horario esté descontrolado. Algo te dice que ha llegado el fin de semana y puedes consentirte un poco.
Tengo que demostrar cada semana que yo soy el mejor.
Quiero mis fines de semana de vuelta para poder estar con mis hijos.
Elimina la diplomacia de una guerra y el problema se desinflará en una semana.
En casa en París tomo un baño de leche dos veces por semana, pero aquí mientras viajo es más difícil. Me hace falta.
Yo vivía de una tajada de pan a la semana.
Durante veinte años, no pasó una sola semana en la que no estaba en un avión.
Me encanta la semana de la moda. Tiene buena vibra y gran energía.
Cuando amas la moda, no hay fines de semana. Todo simplemente se mezcla.
La Semana de la Moda de Londres no es la más organizada, pero eso no me importa. Es un lugar tan emocionante — es pequeño y genial.
Los bienes raíces son mi vida. Es mi trabajo de día, si se quiere. Pero consumen mis noches y fines de semana también.
Antes de decidir a jubilarse, quédate en casa durante una semana viendo los progamas diurnos en la television.
Algunos piensan más de dos o tres veces al año; me he ganado una reputación internacional para mí mismo pensando una o dos veces a la semana.
Voy a la iglesia todos los domingos, que es como ir a la gasolinera una vez por semana y realmente, realmente llenar el tanque.
Fui nombrado Stanley porque la semana antes de que naciera, mi madre y mi padre vieron una película: "Stanley y Livingstone".
Construí mi iglesia en los servicios de Semana Santa, Nochebuena y Norman Vincent Peale.
Estoy en el granero seis días a la semana.
Durante los primeros 13 siglos después del nacimiento de Jesús en Belén, nadie pensó en establecer un nacimiento para celebrar la Navidad. La fiesta cristiana preeminente era Semana Santa, no Navidad.