Riqueza citas y frases
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Mi riqueza no es un tema que disfruto debatiendo.
Donde se acumula la riqueza, los hombres decaen.
El estado verdadero de un hombre de poder y riqueza es estar en sí mismo.
Existimos para que nuestra riqueza suba la cadena económica y quede fuera de nuestro alcance.
La riqueza se engendra en las mentes básicas, la envidia; en las grandes almas, la emulación.
El Señor normalmente da riqueza a la gente tonta, a quienes no les da nada más.
En Inglaterra, un inventor es considerado casi como un loco, y en demasiados casos, su invención termina en decepción y pobreza. En América, un inventor es honrado, la ayuda es próxima y el ejercicio de la ingenuidad, la aplicación de la ciencia al trabajo del hombre, es el camino más corto a la riqueza.
Si tú eres un trabajador para adquirir riqueza, sé generoso en la disposición de la misma. El hombre nunca es tan feliz como cuando da felicidad al otro.
El yogur corta la dulzura y riqueza, modera lo picante y hace cantar a un plato.
La verdadera riqueza es la riqueza que se posee adentro.
El hombre no posee riqueza, la riqueza lo posee a él.
Los orgullosos hacen de todo los hombres sus adversarios, enfrentando sus intelectos, opiniones, trabajos, riqueza, talento o cualquier otro dispositivo de medición mundano contra los demás.
Bill Clinton no es un hipócrita. Si un hombre cree que es justo y moral redistribuir la riqueza, no hay nada hipócrita en sus intentos por redistribuir algo de esa riqueza para sí mismo.
La agresión y la redistribución forzada de la riqueza no tiene nada que ver con las enseñanzas de las grandes religiones del mundo.
El éxito no es una función del tamaño de su título, pero la riqueza de su contribución.
La riqueza no es tener, sino disfrutar lo que se tiene.
Incluso los politicos más izquierdistas adoran la creación de riqueza — mientras se pasa el plato de la colección del Comité de acción política.
Ser caritativo antes de que la riqueza te vuelva codicioso.
El deseo de conocimiento, como la sed de riquezas, aumenta siempre con la adquisición de aquel.
Los estadounidenses asumen que nunca vamos a la guerra para sostener nuestra riqueza, porque la guerra debe entenderse como una empresa moral en consonancia con nuestra identidad como democracia.