Citas de William Shakespeare
(página 5)
Y esto, nuestra vida, exenta de asalto público, encuentra lenguas en los árboles, libros en los arroyos corriendo, sermones en las piedras y lo bueno en todo.
Esta vida, que había sido la tumba de su virtud y su honor, no es sino una sombra andante; un mal jugador, que se exhibe y molesta su hora sobre el escenario, y después no se oye más: es un cuento narrado por un idiota, lleno de ruido y furia, significando nada.
Ahora, alabado sea Dios, que a las almas creyentes da luz en la obscuridad, consuelo en la desesperación.
Hay una marea en los asuntos de los hombres, que llevado al diluvio, conduce a la fortuna. Omitido, todo el viaje de su vida está ligado a aguas poco profundas y de miserias. En un mar tan lleno estamos ahora a flote. Y debemos tomar la corriente cuando viene, o perder nuestras empresas.
El mal que hacen los hombres continúa vivo después de su muerte; el bien queda frecuentemente enterrado con sus huesos.