Citas de William Blake

Para ver un mundo en un grano de arena y al cielo en una flor silvestre sostén al infinito en la palma de tu mano y a la eternidad en una hora.

El que desea pero no actúa, engendra la pestilencia.

Ningún pájaro puede elevarse demasiado alto si se eleva usando sus propias alas.

Piensa por la mañana. Actúa en el mediodía. Come por la la tarde. Duerme por la noche.

El débil en valor es fuerte en astucia.

No tengo nombre: tengo dos días de edad. ¿Cómo debo llamarte? Feliz soy, Alegría es mi nombre. ¡Que dulce alegría te suceda!

Un pensamiento puede llenar la inmensidad.

El arte es el árbol de la vida. La ciencia es el árbol de la muerte.

Si el sol y la luna alguna vez dudaran, inmediatamente se apagarían.

Es más fácil perdonar a un enemigo que perdonar a un amigo.

El necio que persiste en su locura se volverá sabio.

La oposición es una amistad verdadera.

El arte no puede existir sin la exposición de belleza desnuda.

La gloria del cristianismo es conquistar mediante el perdón.

Se realizan cosas grandiosas cuando se encuentran la gente y las montañas.

La exuberancia es la belleza.

Un tonto no ve el mismo árbol que ve un hombre sabio.

En la siembra, aprende; en la cosecha, enseña; en el invierno, disfruta.

El que recibe con agradecimiento se lleva una cosecha abundante.

Cuando los bosques verdes ríen con la voz de la alegría, y la corriente rizada corra riéndose; Cuando el aire sí ría con nuestro alegre ingenio, Y la colina verde ría con el ruido de eso.