Citas de William Blake
Él que haga el bien a otro debe hacerlo en detalles minuciosos: el bien general es la súplica del sinvergüenza, hipócrita y adulador, ya que el arte y la ciencia no pueden existir sino en detalles minuciosamente organizados.
No tengo nombre: tengo dos días de edad. ¿Cómo debo llamarte? Feliz soy, Alegría es mi nombre. ¡Que dulce alegría te suceda!
No es por que los ángeles sean más santos que los hombres o los demonios que son ángeles, sino porque no esperan santidad de nadie, excepto de solo Dios.
Aquellos que refrenan sus deseos, lo hacen porque los mismos son lo suficientemente débiles para ser refrenados.
El árbol que saca a algunos lágrimas de felicidad está ante los ojos de los demás como un objeto verde que lo único que hace es interponerse en el camino. Algunos ven la naturaleza con ridículo y deformidad... y algunos escasos ven naturaleza. Pero a los ojos del hombre de la imaginación, la naturaleza es imaginación misma.
Si las puertas de la percepción estuvieran limpias, todo se presentaría ante el hombre tal como es, infinito.