Realmente, no pierdes nada hasta que dejas de intentar.
Yo sostengo la puerta a las dama. Soy un caballero.
Yo era uno de los más salvajes Santa Clauses que jamás tuvieron.
No me preocupo. No dudo. Me atrevo. Soy un rebelde.
Soy tierno por dentro.
Se necesita un hombre inteligente para hacerse el tonto.
Soy un cristiano valiente, no un cristiano cobarde.
Sirvo a Dios.
Solo respondo a Dios.