Citas de Joyce Meyer
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Mientras lees o escuchas la Palabra de Dios y pasas tiempo hablando con Él en oración, tu espíritu eventualmente se hará más fuerte que tu carne.
Es simplemente parte de la naturaleza humana intentar y resolver cosas. Así, que cuando estamos en medio de una situación, generalmente tratamos de razonar la manera de atravesarla.
La gente extremadamente religiosa y legalista tiene una crítica o juicio sobre todos y todo. Sólo poseen una manera de derribar a la gente con lo que dicen.
Muchas personas en el mundo occidental son echadas a perder por las conveniencias de nuestra cultura.
La depresión comienza con la decepción. Cuando la decepción amarga nuestra alma, ésta conduce al desaliento.
El águila no le teme a la adversidad. Tenemos que ser como el águila y tener un espíritu intrépido de conquistador.
La paz es uno de los regalos más preciados que Dios ha prometido a sus hijos. Lo sé, porque durante muchos años mi vida no era tranquila, y yo era miserable.
No puedo enseñar una manera de vivir y vivir mi vida de otra manera. Lo que hago en la vida debe ser coherente con las cosas que digo. Y lo mismo es verdad para ti.
Muchas personas se sienten tan presionadas por las expectativas de los demás que les hace frustrados, miserables y confundidos acerca de lo que deben hacer. Pero hay una manera de vivir una vida simple, llena de gozo, paz, y la clave es aprender a ser conducido por el Espíritu Santo, no por las tradiciones o las expectativas del hombre.
Si tu vida interior no está produciendo lo que quisieras en el exterior, no te desanimes... sólo disponte a cambiar.
He descubierto que cuando nos tomamos un tiempo para renovar nuestras mentes con la palabra de Dios, aprendemos a pensar como Dios piensa, decir lo que Dios dice y actuar como él quiere que actuemos.
A pesar de que Dios nos ama, aún tenemos un problema: el pecado. Es importante para nosotros aprender a confrontar el pecado y vencerlo, porque aunque Dios ama a los pecadores, aborrece el pecado. Y él lo odia por lo que nos hace a nosotros y por cómo nos priva de la vida abundante que Jesús murió para darnos.
Aunque Dios nos ama incondicionalmente, se enoja por el pecado, la crueldad y el mal. Pero no es un Dios enfadado. Dios odia el pecado, ¡pero ama a los pecadores! Él nunca aprobará el pecado en tu vida, pero siempre te amará y quiere trabajar contigo para que avance en una vida Santa en Cristo.
Cuando me di cuenta que pensar correctamente es fundamental para una vida victoriosa, empecé a tomar más en serio lo que estaba pensando y a seleccionar cuidadosamente mis pensamientos.
Lo que tenemos que entender es que cuando las tradiciones se convierten en leyes, reglas, obligaciones y expectativas que otros pusieron en nosotros y que no queremos cumplir, entonces pierden su significado real y quitan la alegría de nuestras vidas. Y si somos demasiado religiosos, no podremos ser guiados por el Espíritu Santo y disfrutar de una relación íntima con Él.
Creo que todo el mundo experimenta depresión en algún grado en algún momento de sus vidas. Y probablemente hay millones de personas que viven con un bajo nivel de tristeza y pesadez día tras día.
