Citas de James Madison
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Una milicia bien regulada, compuesta por el cuerpo del pueblo, entrenada en armas, es la mejor defensa natural de un país libre.
Es una verdad universal que la pérdida de libertad en la casa se cobra con suministros contra el peligro, real o fingido, desde el extranjero.
El cautiverio religioso aprisiona y debilita la mente y la inhabilita para todo emprendimiento noble, toda perspectiva ampliada.
Donde prevalece un exceso de poder, la propiedad de ningún tipo es debidamente respetada. Nadie está seguro de sus opiniones, su persona, sus facultades ni sus posesiones.
Déjenme recomendar la mejor medicina del mundo: un viaje largo, en un tiempo cálido, a través de un país agradable, en etapas fáciles.
Una democracia pura es una sociedad que consiste de un pequeño número de ciudadanos, que se reúnen y administran el gobierno en persona.
Así como se dice que un hombre posee un derecho a su propiedad, igualmente se puede decir que posee una propiedad en sus derechos.
Un gobierno popular sin información popular o los medios para acceder a ella es sólo un prólogo a una farsa, a una tragedia o quizás a las dos.
Al plantear un gobierno que debe ser administrado por gente sobre gente, primero se debe permitir al gobierno controlar a los gobernados; y en el siguiente lugar obligarlo a controlarse a sí mismo.
La feliz Unión de estos Estados es una maravilla; su Constitución un milagro; su ejemplo la esperanza de la libertad en todo el mundo.
En las repúblicas, el gran peligro es que la mayoría no respeta suficientemente los derechos de la minoría.
El propósito de la separación entre iglesia y estado es mantener para siempre de estas orillas la contienda incesante que ha empapado el suelo de Europa con sangre durante siglos.
El conocimiento siempre gobernará la ignorancia; y un pueblo que quiere ser sus propio gobernador debe armarse con el poder que el conocimiento da.
Suponer que cualquier forma de gobierno asegurará la libertad o la felicidad sin ninguna virtud en la gente, es una idea quimérica.