Citas de H. L. Mencken

Los solteros conocen más de mujeres que los hombres casados; si no fuera así estuvieran casados támbien.

Arzobispo, un eclesiástico cristiano de un rango superior al logrado por Cristo.

La guerra nunca cesará hasta que los bebés empiecen a venir al mundo con cerebros más grandes y glándulas suprarrenales más pequeñas.

Cuanto más crezco más desconfío de la doctrina familiar de que la edad trae sabiduría.

Es difícil para el mono creer que desciende del hombre.

La única gente verdaderamente feliz son las mujeres casadas y los hombres solteros.

El hombre llora al pensar que morirá tan pronto; la mujer, al pensar que nació hace tanto tiempo.

La poesía hace bastante cuando encanta, pero la prosa también debe convencer.

Ningún hombre casado es realmente feliz si tiene que beber un whisky peor que el que solía beber cuando era soltero.

La vida es una calle sin salida.

La moral es la teoría de que cada acto humano debe ser bueno o malo y que el 99% de ellos está equivocado.

El matrimonio es una maravillosa institución, pero ¿a quién le gustaría vivir en una institución?

Odio todos los deportes con tanta rabia como una persona que le gustan los deportes odia el sentido común.

La democracia es también una forma de adoración. Es la adoración de los chacales los idiotas.

Morir por una idea; es sin duda noble. ¡Pero cuánto más noble sería si los hombres murieran por ideas que fueran verdaderas!

Los esposos nunca se vuelven buenos, sólo llegan a ser competentes.

Un hombre malo es el tipo que llora cada vez que habla de una buena mujer.

Estamos aquí y es ahora. Más allá de eso, todo el conocimiento humano es una tontería.

Uno de los delirios más empalagosos de los humanos es la noción de que la amistad debe ser eterna, o en todo caso, de toda la vida, y que cualquier acto que le pone un término es de algún modo deshonroso.

Un hombre puede ser necio y no saberlo, pero así no es el caso si está casado.