Citas de Charles Stanley
Básicamente, hay dos rutas que puedes tomar la fe o el miedo. Es imposible confiar y no confiar en Dios al mismo tiempo.
A la gente no le gusta la idea de las consecuencias. Quieren ser capaces de vivir su vida libremente y hacer lo que quieren hacer sin ninguna consecuencia. Y sabemos que simplemente así no es la vida.
Ciertamente respeto las opiniones de otras personas, pero yo no votaría por que una mujer sea pastora de una iglesia.
La base de la vida cristiana es la obediencia y a la mayoría de la gente ni siquiera les gusta esa palabra.
En el momento en que alguien decide confiar en Jesucristo, sus pecados son borrados, y es adoptado en la familia de Dios. Ese individuo es distinguido como un hijo de Dios, con un propósito sagrado.
La sabiduría terrenal está haciendo lo que viene naturalmente. La sabiduría de Dios está haciendo lo que el Espíritu Santo nos impulsa a hacer.
El tiempo que pases solo con Dios transformará tu carácter y aumentará tu devoción. Luego, tu integridad y comportamiento divino en un mundo incrédulo hará que los otros deseen conocer al Señor.
El plan de Dios para agrandar su reino es muy sencillo — una persona le habla a otra sobre el Salvador. Todavía estamos ocupados y llenos de excusas. Recuerda, el destino eterno de alguien está en juego. El gozo que vas a tener cuando sepas que esa persona está en el cielo supera con creces cualquier incomodidad que sientas a la hora de compartir el Evangelio.
Cuando aprendemos de la experiencia, las cicatrices del pecado nos pueden conducir a la restauración y a una renovada intimidad con Dios.
El miedo reprime nuestro pensamientos y acciones. Crea indecisión que resulta en estancamiento. He conocido gente talentosa que pospone indefinidamente tomar acción por no arriesgarse a tener un fracaso. Las oportunidades perdidas causan erosión en la confianza, y comienza la espiral descendente. .
El que Dios le hable al corazón es una experiencia majestuosa, una experiencia que la gente puede perderse si monopolizan la conversación y nunca se detienen para escuchar las respuestas de Dios.
Si hemos construido en los frágiles pilares de la sabiduría humana, el orgullo y el amor condicional, las cosas pueden lucir bien durante un tiempo, pero un cimiento débil provoca el colapso cuando vengan las tormentas.
Podemos estar cansados, cansados y angustiados emocionalmente, pero después de pasar tiempo a solas con Dios, descubrimos que nos inyecta la energía, el poder y la fuerza en nuestros cuerpos.
Agradece al Señor por usar a cada persona como herramienta en tu vida para profundizar tu entendimiento de Su gracia y amoldarte a la imagen de Su Hijo.