Vivir una guerra me ayudó a hacerme bastante fuerte.
No sigo las supersticiones en la cancha.
Yo uso el champú y acondicionador Moroccanoil.
En Belgrado, todo es posible.
Nunca sabes a dónde te llevará el futuro.
Todo lo que vemos es el gimnasio, la cancha de tenis y la cama.
Rendirse nunca es una opción.
La recuperación es muy importante.
Yo sé que las chicas no somos las más fáciles de entrenar.
Mi meta es ser No.1 y ganar jonrones con las bases llenas.
Tengo mucha fe en mí mismo.
Nunca he sido una persona muy ostentosa.
Amo, amo, amo a mis abuelos.
Me encanta correr. Así es como aclaro mi mente.
Soy una persona controlada.
Siempre ha sido mi sueño competir.
Yo siempre mantengo mi maquillaje muy sencillo.