Citas de Aldous Huxley
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Fue una de esas tardes cuando los hombres sienten que la verdad, la bondad y la belleza son una. Por la mañana, cuando cometen su descubrimiento al papel, cuando otros leen lo escrito allí, parece totalmente ridículo.
Lo más penoso que le puede pasar a un profeta es que se le pruebe estar equivocado. Lo siguiente más penoso es que se le pruebe estar en lo correcto.
La dignidad oficial tiende a aumentar en proporción inversa a la importancia del país en donde la oficina se encuentra.
Todo hombre que sabe leer tiene en ello el poder de magnificarse a sí mismo, de multiplicar las formas en las que existe, de hacer su vida plena, significativa e interesante.
Deberías darte prisa y adquirir el hábito del cigarro. Es una de las mayores felicidades. Y mucho más duradero que el amor, mucho menos costoso en el desgaste y destrozo emocional.
No hay ninguna fórmula o método. Aprendes a amar amando, prestando atención y haciendo lo que uno descubre de ese modo que se tiene que hacer.
Todos los dioses son caseros, y somos nosotros los que los manipulamos y así, les damos el poder para hacer lo mismo con nosotros.
La finalidad del propagandista es hacer un grupo de personas olvidar que ciertos otros grupos de gente son humanos.
Los niños se destacan por su inteligencia y fervor, por su curiosidad, su intolerancia de pena,s su claridad y la crueldad de su visión.
La esclavitud es la vida de la personalidad, y para la esclavitud la persona misma luchará con incansable ingenio y con la astucia más rebelde.
El Infierno no está solamente empedrado de buenas intenciones; tiene sus paredes y su techo de ellas. Sí y también está amoblado con ellas.
Un hombre aniñado no es un hombre cuyo desarrollo ha sido detenido; por el contrario, él es un hombre que se ha dado a sí mismo la oportunidad de continuar desarrollándose mucho después de lo que la mayoría de adultos se ha amortiguado en un capullo del hábito y costumbre de la mediana edad.
El encanto de la historia y su enigmática lección consisten en el hecho de que, a través de las distintas épocas, nada cambia y, sin embargo, todo es completamente diferente.