Batalla citas y frases
Lo que está en juego en el conflicto no cambia. La batalla determina quién controlará la riqueza o su equivalente.
En la ley y la política, creo que la batalla esencial es la metabatalla de la estructura de la narración.
En mis sueños oigo otra vez el choque de armas, el ruido de fusilamiento, el murmullo extraño y triste del campo de batalla.
Cuando sea que la muerte pueda sorprendernos, demosle la bienvenida si nuestro grito de batalla ha alcanzado aunque sea un oído receptivo y otra mano se extiende para tomar nuestros brazos.
La guerra es una pelea entre dos ladrones demasiado cobardes para luchar su propia batalla.
Morir en la batalla sería mi mayor alegría.
Siempre ha sido una batalla el jugar contra los Warriors.
Desde el interior puedes dar la mejor batalla ante todo mal existente.
Pasamos nuestra vida, todos nosotros, esperando el gran día, la gran batalla, o la cesión del poder. Pero esa esperanza externa no le es otorgada a muchos, aunque tampoco es necesaria. En la medida en que nuestro ser se pone tenso, se dirige con pasión hacia aquello que conforma el espíritu de todas las cosas, en esa medida ese espíritu surgirá de nuestro propio esfuerzo oculto y anónimo.
La batalla es larga, pero eso es el fútbol, amigo.
El EIIL nunca ha peleado una batalla real.
Esta no es una batalla entre los Estados Unidos de América y el terrorismo, sino entre el mundo libre y democrático y el terrorismo.
La batalla por los derechos de las mujeres ha sido en gran parte ganada.
Acabo de regresar de visitar a los Infantes de Marina en el campo de batalla, y no existe en el mundo una organización de lucha más noble!
Tenía mis propias tácticas de batalla.
Soy un espía en la casa que soy yo. Le reporto a las líneas del frente de batalla que soy yo. Estoy un poco azorado del evento que es mi vida.
Probablemente la batalla de Waterloo se ganó en los campos de juego de Eton, pero las primeras batallas de todas las guerras posteriores se han perdido allí.
Creo en una religión que cree en la libertad. Cuando tengo que aceptar una religión que no me deja luchar una batalla por mi gente, digo a la mierda con esa religión.
La sorpresa es la mitad de la batalla. Muchas cosas son la mitad de la batalla, perder es mitad de la batalla. Pensemos en qué es la batalla entera.
Demasiadas sesiones de resolución de problemas se convierten en campos de batalla donde se toman decisiones basados en el poder en lugar de la inteligencia.