Saber citas y frases
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Un árbol es conocido por su fruto; un hombre por sus obras. Una buena obra nunca se pierde; aquel que siembra gentileza cosecha amistad, y aquel que siembra bondad recoge amor.
A veces me siento feliz y a veces no. Después de todo, soy un ser humano, tú sabes. Y me alegro de que a veces seamos felices y a veces no. Tu sabiduría se obtiene por tener emociones diferentes.
Los tres grandes elementos esenciales para lograr cualquier cosa que valga la pena son: el trabajo, la perseverancia y el sentido común.
La bondad es más importante que la sabiduría, y el reconocimiento de esto es el principio de la sabiduría.
Si no expresas tus propias ideas originales, si no escuchas a tu propio ser, te habrás traicionado a ti mismo.
La bondad es sabiduría.
El peligro mayor para la mayoría de nosotros no radica en fijar nuestra meta demasiado alta y quedarnos cortos; sino en fijar nuestra meta demasiado baja y lograrla.
La sabiduría navega con el viento y el tiempo.
Un hombre debe ser lo suficientemente grande para admitir sus errores, lo suficientemente inteligente como para beneficiarse de ellos y lo suficientemente fuerte para corregirlos.
Todo en el mundo puede soportarse, excepto la prosperidad continua.
Los libros son las siempre ardientes lámparas de sabiduría acumulada.
Junto con el orgullo existen muchas maldiciones. Con la humildad vienen muchas bendiciones.
Haz un hábito de no ser crítico acerca de las cosas pequeñas.
¿Pero que es libertad sin sabiduría y sin virtud? Es el mayor de todos los males posibles; ya que es tontería, vicio y locura, sin costo ni restricción.
La mayor sabiduría es darse cuenta de lo que te falta.
Cuando es evidente que los objetivos no pueden alcanzarse, no ajuste las metas, ajuste los pasos.
Los que mejoran con la edad abrazan el poder de crecimiento y logro personal y comienzan a reemplazar la juventud con la sabiduría, la inocencia con la comprensión y la falta de propósito con la realización personal.
Si la fortuna te favorece no seas eufórico, si te frunce el ceño no te desanimes.
Existen tres métodos para convertirte en alguien sabio: primero, por la reflexión, que es el más noble; en segundo lugar, por la imitación, que es el más fácil; y en tercer lugar por la experiencia, que es el más difícil.
Incluso cuando tienes dudas, da ese paso. Corre riesgos. Los errores nunca son un fracaso, pueden ser transformados en sabiduría.