Dignidad citas y frases
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Otros hombres famosos, los que mucho dicen y poco actúan, pronto se evaporan. La acción es la dignidad de la grandeza.
El amor y la dignidad no pueden compartir la misma morada.
La gente de Inglaterra ha sido llevada en Mesopotamia a una trampa de la que resultará difícil escapar con dignidad y honor.
Las personas célebres pierden la dignidad cuando son vistas más cercanamente.
La vida no es una cuestión de lugar, cosas o comodidad; por el contrario, se refiere a los derechos humanos básicos de dignidad humana, justicia, familia y país.
El silencio es mi dignidad.
Además de la dignidad, la lealtad, la disciplina, el corazón y la mente, la confianza es la llave para todas las cerraduras.
Egipto necesita alcanzar al resto del mundo. Necesitamos ser libres y democráticas y, una sociedad donde las personas tengan el derecho de vivir con libertad y dignidad.
Mi dignidad y la buena televisión, éstas nunca se encontrarán.
No hay dignidad en la televisión.
Ser dueño de mi identidad... se enlaza con mi valor de dignidad.
Vamos construir puentes, mis amigos, construir puentes a la dignidad humana a través de ese golfo que separa a Estados Unidos negro de Estados Unidos blanco.
Por las humillaciones de los hombres vienen las dignidades.
La música o es sagrada o es secular. La sagrada está de acuerdo con su dignidad y aquí tiene su mayor efecto en la vida, un efecto que sigue siendo el mismo a través de todas las edades y épocas. La música secular debe ser alegre en todo.
El dinero no es Dios, y la dignidad humana es muy importante.
El trabajo es más que ganarse la vida, es tan fundamental como eso. Es esencial para la dignidad humana, para nuestro sentido de autoestima como personas útiles, independientes y libres.
De todas las virtudes y dignidades de la mente, la bondad es la más grande, siendo el carácter de la Deidad; y sin ella, el hombre es un ser ocupado, travieso y miserable.
La posesión más lujosa, el tesoro más valioso que todos tenemos, es la dignidad personal.
Si te revelas como un tonto, puedes hacerlo con dignidad, sin bajarte los pantalones. Y si te bajas los pantalones, todavía puedes hacerlo con dignidad.
Por la noche, cuando las cortinas se cierran y el fuego se enciende, mis libros alcanzan una dignidad colectiva.