Citas de Vladimir Nabokov
Una obra de arte no tiene importancia alguna para la sociedad. Sólo es importante para el individuo.
Una obra maestra de ficción es un mundo original y, como tal, es probable que no encaje en el mundo del lector.
Discutir en clase significa dejar que veinte cabezas de madera jovenes y dos neuróticos engreídos discutan sobre algo que ni sus maestros ni ellos saben.
Todas mis historias son redes de estilo y ninguno a primera vista parece contener mucha materia cinética. Para mí el estilo es materia.
Un novelista está, como todos los mortales, más plenamente en casa sobre la superficie del presente que en el cieno del pasado.
Cuando más dotados y charlatanes sean los personajes, mayores las posibilidades de que sean parecidos al autor en tono o matiz de la mente.
No hay nada en el mundo que yo aborrezca más que la actividad grupal, ese baño comunal donde se mezclan los peludos y los resbaladizos en una multiplicación de la mediocridad.
La cuna mece por encima de un abismo, y el sentido común nos dice que nuestra existencia no sea más que una breve hendidura de luz entre dos eternidades llenas de oscuridad.
Para ir sobre seguro, prefiero aceptar solo un tipo de poder: el poder del arte sobre la basura, el triunfo de la magia sobre lo salvaje.
