Citas de Thomas Szasz

En el reino animal, la regla es comer o ser comido; en el reino humano, es definir o ser definido.

Antiguamente, cuando la religión era fuerte y la ciencia débil, los hombres confundían la magia con la medicina; ahora, cuando la ciencia es fuerte y la religión débil, los hombres confunden la medicina con la magia.

El aburrimiento es la sensación de que todo es una pérdida de tiempo; la serenidad, que nada lo es.

La gente suele decir que tal o cual persona todavía no ha se encontrado a sí misma. Pero el ser no es algo que uno encuentra, es algo que uno crea.

Si los muertos hablan contigo, eres un espiritista; si Dios habla contigo, eres un esquizofrénico.

Quien no acepta y respeta a los que quieren rechazar la vida, no acepta y respeta verdaderamente la vida.

Un maestro debería tener autoridad máxima y poder mínimo.

Un niño se convierte en un adulto cuando se da cuenta de que tiene derecho de no sólo estar en lo correcto sino también a equivocarse.

El pensamiento claro requiere coraje más que inteligencia.

No hay tal cosa como enfermedad mental, por lo tanto tampoco hay tal cosa como psicoterapia.

Cada acto de aprendizaje consciente requiere de la disposición para sufrir una lesión a la autoestima de uno. Es por eso que los niños pequeños, antes de que estén conscientes de su propia importancia, aprenden tan fácilmente.

Cuando alguien ya no puede reírse de sí mismo, es tiempo de que otros se rían de él.

Testimonio de psiquiatras expertos: la mentira disfrazada de medicina.

El proverbio advierte de que 'usted debe no morder la mano que le alimenta'. Pero tal vez debiera, si le impide alimentarse por sí mismo.

Si le hablas a Dios estás orando; Si Dios te habla, tienes esquizofrenia.

En el pasado, los hombres crearon las Brujas: ahora crean pacientes con enfermedades mentales.

No hay psicología; solo hay biografía y autobiografía.

El sistema no es estúpido, pero la gente en él lo es.

La 'Psicoterapia' es una conversación privada y confidencial que no tiene nada que ver con enfermedad, medicina o curación.

Dos errores no hacen un acierto, pero sí hacen una buena excusa.