Citas de Thomas Merton
Octubre es una temporada buena y peligrosa en Estados Unidos. Un momento maravilloso para empezar cualquier cosa. Vas a la universidad, y cada curso en el catálogo se ve maravilloso.
Las reales contradicciones de mi vida son en cierto sentido signos de la gracia de Dios para conmigo.
Sé bueno, mantén tus pies secos, tus ojos abiertos, tu corazón en paz y tu alma en la alegría de Cristo.
Tener en cuenta a las personas, los acontecimientos y las situaciones solo a luz de su efecto sobre mí es vivir en la puerta del infierno.
El último día de enero de 1915, en el segundo año de la Gran Guerra, bajo la sombra de algunas montañas francesas en las fronteras de España, yo vine a este mundo.
La muerte es alguien que ves muy claramente con los ojos en el centro de tu corazón: ojos que ven no reaccionando a la luz, sino reaccionando a una especie de escalofrío dentro de la médula de tu propia vida.
No puedo hacer que el universo me obedecezca. No puedo hacer que otras personas se ajusten a mis propios caprichos y fantasías. Ni siquiera puedo hacer que mi propio cuerpo me obedezca.
Tropezamos y caemos constantemente incluso cuando estamos más iluminados. Pero cuando estamos en la verdadera oscuridad espiritual, ni siquiera sabemos que hemos caído.
¿Qué podemos ganar al viajar hasta la luna si no somos capaces de cruzar el abismo que nos separa de nosotros mismos? Este es el más importante de todos los viajes de descubrimiento, y sin él, el resto no son sólo inútiles, sino desastrosos.
No estamos en paz con los demás porque no estamos en paz con nosotros mismos, y no estamos en paz con nosotros mismos porque no estamos en paz con Dios.
La soledad no es algo que uno debe desear para el futuro. Más bien, es una profundización del presente y a menos de que uno la busque en el presente nunca la encontrará.
