Citas de Joseph Joubert
(página 2)

La genialidad comienza las grandes obras; el trabajo por sí mismo las termina.

La mente concibe con dolor, pero presenta con deleite.

La inocencia nunca es sospechosa.

Es fácil comprender a Dios siempre y cuando no intentes explicarlo.

El que tiene imaginación sin aprender tiene alas pero no pies.

La miseria es casi siempre el resultado del pensamiento.

Solamente escoge en matrimonio a un hombre a quien escogerías como amiga si fuese mujer.

Quienes nunca retractan sus opiniones se aman más a sí mismos lo que aman a la verdad.

Enseñar es aprender dos veces.

Nunca cortes lo que puedas desatar.

Debemos respetar el pasado y desconfiar del presente, si queremos velar por la seguridad del futuro.

Sin el mundo espiritual el mundo material es un enigma descorazonador.

El mejor remedio para un mal genio es una larga caminata.

Una parte de la bondad consiste en amar a la gente más de lo que se merecen.

La dirección de la mente es más importante que su progreso.

Las pasiones de los jóvenes son los vicios de los viejos.

No encontrarás la poesía en ningún lugar a menos que la traigas contigo.

Cuando uno va en busca de miel, debe esperar que lo piquen las abejas.

Es mejor debatir una cuestión sin resolver que resolver una cuestión sin debatir.

El objetivo de la discusión, o del debate, no debe ser la victoria, sino el progreso.