Citas de John Ruskin
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Como la vida es muy corta y las horas de tranquilidad en ella pocas, no debemos malgastar ninguna de ellas leyendo libros sin valor.

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Ese país es el más rico que nutre la mayor cantidad de seres humanos nobles y felices.

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Está escrito en el cielo abovedado; mira hacia fuera de cada estrella. Es la poesía de la Naturaleza; es aquella que eleva el espíritu dentro de nosotros.

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Las grandes fortunas se basan o en la ocupación de tierras, o en el préstamo, o en los impuestos del trabajo.

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Cada posesión creciente nos carga con una nueva fatiga.

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Todo trabajo grande y hermoso ha sido el resultado de en primar lugar haber mirado sin encogerse en la oscuridad.

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No se suponía que los hombres contaran con la precisión de las herramientas para ser exactos y perfectos en todas sus acciones.

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Dar limosna no sirve de nada a menos que también se reflexione.

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¿Cuánto tiempo miraría la mayoría de gente el mejor libro antes de que dieran el precio de un rodaballo grande por él?.

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El arte que podríamos llamar generalmente arte de la borraja, a diferencia del que es del negocio de la vida de los hombres, es, en el mejor sentido de la palabra, grotesco.

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El es el mejor artista que ha plasmado, en la totalidad de sus obras, el mayor número de las más grandes ideas.

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Cuanto más alto se encuentra un hombre, la palabra vulgar se convierte mas incomprensible para él.

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El niño que desea educación se superará por ella; el niño al que no le gusta, se deshonrará.

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Un libro que vale la pena leer vale la pena comprar .

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El primer deber de un estado es ver que cada niño nacido en el mismo tenga buena vivienda, ropa, alimentación y educación hasta que logre años de discreción.

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La primera condición de la educación es poder poner a alguien a hacer trabajo saludable y significativo.

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Camina mientras tengas luz, no sea que te caiga la oscuridad.

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Por lo general, el orgullo es la base de todos los grandes errores.

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Para que la gente puede ser feliz en su trabajo, se necesitan estas tres cosas: deben estar hechos para él. No deben hacer demasiado de él. Y deben tener una sensación de éxito en él.

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La educación moderna se ha dedicado a la enseñanza de la insolencia, y luego nos quejamos de que no podemos controlar nuestras multitudes.

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