Citas de Immanuel Kant
(página 2)
Todo nuestro conocimiento comienza con los sentidos, luego procede a la comprensión y termina con la razón. No hay nada superior a la razón.
Los únicos objetos de la razón práctica son las del bien y del mal. Pues el primero se entiende por objeto necesariamente deseado según un principio de razón; y el último necesariamente rechazado, también según un principio de razón.
Incluso los filósofos alaban a la guerra como ennoblecedora de la humanidad, olvidando a los griegos que afirmaron: "La guerra es mala ya que engendra más maldad que de la que mata".
Todo pensamiento debe, directa o indirectamente, a través de ciertos personajes, estar conectado en última instancia a intuiciones y por lo tanto, con nosotros, a la sensibilidad, porque de ninguna otra manera se nos puede dar un objeto.
Para la ley, un hombre es culpable cuando viola los derechos de los demás. Para la ética, es culpable aunque solo haya pensado en hacerlo.
La moralidad no es la doctrina de cómo podriamos hacernos felices, sino cómo podriamos hacernos dignos de la felicidad.