Citas de Harriet Beecher Stowe
Los azotes y el abuso son como el láudano: tienes que aumentar la dosis, conforme disminuye la sensibilidad.
Nunca te des por vencido, puese ese es justo el lugar y tiempo en que el viento empieza a soplar del otro lado.
Hacer cosas comunes perfectamente vale mucho más la pena nuestro esfuerzo que hacer cosas poco comunes de forma respetable.
Cuando te metes en un lugar apretado y todo va en tu contra, hasta que parece que no puedes soportar un minuto más, nunca te rindas, porque ese es solo el lugar y el tiempo que la marea cambiará.
Ser realmente grande en pequeñas cosas, ser verdaderamente noble y heroico en los insípidos detalles de la vida cotidiana, es una virtud tan rara al igual que ser digno de canonización.
Las lágrimas más amargas que se derraman sobre las tumbas se deben a palabras que no se dijeron y obras que no se hicieron.
En todos los rangos de la vida el corazón humano anhela lo hermoso; y las cosas hermosas que Dios hace son Su regalo para todos por igual.
Se trata de tomar el lado de los débiles contra los fuertes, algo que las mejores personas siempre han hecho.