Citas de D. H. Lawrence
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Los hombres son más libres cuando son más inconscientes de la libertad. El grito es un traqueteo de cadenas, siempre lo fue.
Es muy cierto, como algunos poetas han dicho, que el Dios que creó al hombre debe haber tenido un siniestro sentido del humor, lo creó como un ser razonable, pero le obligó a tomar esta postura ridícula y lo impulsó con ciego deseo a este ridículo espectáculo.
El mito es un intento de narrar una experiencia humana entera, de los cuales el objetivo es demasiado profundo, demasiado profundo en la sangre y el alma, para la explicación mental o para una descripción.
La creación destruye mientras marcha, tira hacia abajo un árbol para que otro se levante. Pero la humanidad ideal aboliría la muerte, se multiplicaría en millones y millones, levantaría una ciudad tras la otra, salvaría cada parásito que viva, hasta que la acumulación de mera existencia crezca hasta convertirse en horror.
La única justicia es seguir la intuición sincera del alma, esté enojada o tranquila. El enojo es justo y la lástima es justa, pero el juicio nunca es justo.
Sexo y belleza son inseparables, como la vida y la conciencia. Y la inteligencia que va con el sexo y belleza y surge del sexo y belleza, es intuición.
Nunca vi una criatura salvaje sentir lastima por sí misma. Un pequeño pájaro caerá muerto y congelado de una rama sin jamás haber sentido pena por sí mismo.
