Citas de Carl Sagan
La imaginación a menudo nos lleva a mundos que nunca fueron, pero sin ella no vamos a ninguna parte.
Nuestra especie necesita y merece una ciudadanía con mentes despiertas y una comprensión básica de cómo funciona el mundo.
Para mí, es mucho mejor comprender el universo tal cual es en realidad creer en una ilusión, aunque ésta sea agradable y tranquilizadora.
Un clero célibe es una idea especialmente buena porque tiende a suprimir cualquier propensión hereditaria hacia el fanatismo.
Cuando lo descubres por ti mismo –incluso si eres la última persona sobre la Tierra en ver la luz–, nunca lo olvidarás.
¿Quiénes somos? Encontramos que vivimos en un planeta insignificante de una estrella monótona perdida en una galaxia escondida en algún rincón olvidado de un universo en el cual hay más galaxias que personas.
Vivimos en una sociedad exquisitamente dependiente de la ciencia y la tecnología, en la cual casi nadie sabe nada acerca de la ciencia y la tecnología.
Personalmente, estaría encantado si hubiera una vida después de la muerte, especialmente si me permitiera seguir aprendiendo sobre este mundo y otros, si me diera la oportunidad para descubrir cómo la historia acaba.
También hemos organizado las cosas para que casi nadie entienda la ciencia y la tecnología. Esta es una receta para el desastre. Que podríamos llegar lejos con ella por un tiempo, pero tarde o temprano esta mezcla combustible de ignorancia y poder va a estallar en nuestras caras.
Pero el hecho de que algunos genios fueron burlados no implica que todos los que han sido burlados son genios. Se burlaron de Colón, se burlaron de Fulton, se burlaron de los hermanos Wright. Pero ellos también se burlaron de Bozo el payaso.
A menudo me sorprende cuanto más habilidad y entusiasmo por la ciencia hay entre los estudiantes jóvenes de escuela primaria, que entre los estudiantes universitarios.
Hemos dispuesto una civilización en la que los elementos más cruciales dependen profundamente de la ciencia y la tecnología.
El escrutinio escéptico es el medio, en tanto la ciencia como la religión, en que pensamientos profundos pueden ser separados de tonterías profundas.