Casa citas y frases
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Si mi mundo fuera a ceder mañana, miraría hacia atrás a todos los placeres, emociones y lo valioso que he tenido la suerte de haber tenido. No hacia la tristeza, no hacia mis errores o a mi padre al salir de casa, sino a la alegría de todo lo demás. Habrá sido suficiente.
Fuera de estar en casa con mi familia, prefiero una multitud.
El hogar es el lugar que más nos encanta y donde más nos quejamos.
Compro discos... de vinilo. Tengo un tocadiscos en casa.
Hay sólo dos cosas por las que debemos luchar. Una es la defensa de nuestros hogares y la otra es la Carta de Derechos.
El domingo, para mí, es estar en casa con la familia sin ningún plan.
Soy un trabajador de maratón y madre maratonista. Pasaré tres o cuatro días completamente engullida por el trabajo. Y si llego a casa a tiempo para decir buenas noches, puedo tener una hora con las chicas, tal vez una breve cena familiar o un paseo familiar con el perro, y después regreso a la computadora a prepararme para los shows de mañana.
Me gusta regresar a casa y participar en mi comunidad.
Un día en Afganistán es como pasar una semana en casa.
Hogar, más que nada, significa calor y una cama.
Bueno, después del divorcio, me fui a casa y ¡encendí todas las luces!
Para que te sientas como en casa, quédate en casa.
Tuve suerte de estar en casa y criar a nuestros bebés.
Los jonrones de ayer no ganan los partidos de hoy.
La lectura no es buena para un jugador de béisbol. No es bueno para sus ojos. Si mis ojos se dañaran aunque sea un poco, no podría batear jonrones. Así que abandoné la lectura.
Yo sólo tuve una superstición. Me aseguré de tocar todas las bases cuando logré un home run.
Cada strike me acerca más al próximo jonrón.
En una casa donde haya un marido en pleno uso de sus facultades físicas, se espera que él sea el sostén de la familia.
Ciertamente ningún niño debería temer a su propio padre, especialmente a un padre de sacerdocio. El deber de un padre es hacer de su hogar un lugar de felicidad y alegría.
La censura, como la caridad, debe empezar en casa, pero, a diferencia de la caridad, debe terminar allí.