Joyce Meyer frases
Sí, Dios espera que vivamos una vida santa, consagrada. Pero ni siquiera la mejor de nuestras intenciones puede hacer que suceda. Afortunadamente, Él no espera de nosotros que nos hagamos santos. Él sólo quiere que aprendamos a depender de Él para hacernos santos.
Otras frases
En países de bajos ingresos, es difícil llegar a un...Los hombres también pueden ser tiernos...Nadie puede posiblemente alcanzar ningún éxito verdadero...Siento que todavia no he hecho mi mejor trabajo...Al final, creo que todos deberíamos ser tratados...Nadie es mi jefe...
