Gilbert Parker frases
No es el corazón roto el que mata, sino el orgullo roto, monseñor.
Otras frases
Bueno, sí, he despedido a muchísima gente. Generalmente...Estaba asustado muchas veces en el Everest, pero todo esto...Todos los hombres profesan honestidad siempre que puedan...No tengo muchas anécdotas. Tal vez debería hacer algo...Vengo a jugar todos los días...No es el cumplimiento de un deber sino la libertad misma es...