Escuela citas y frases
(página 9)
Los graduados de la escuela católica exhiben una amplia variedad de cualidades que no sólo les ayudarán en sus carreras sino también en sus vidas familiares y comunitarias.
Nunca dejo que la escuela interfiera con mi educación.
Sucede que hay mucha gente que pasó una hora en Internet y creen que saben mucho de física pero no funciona así... Hay una razón por la que hay escuelas de graduados en estos departamentos.
Fui a la escuela de drama en Escocia.
Manejaba mi bicicleta a la escuela todos los días, desde los cinco años hasta los catorce. Era una ciudad pequeña; uno podía ir a cualquier parte.
Las chicas de las escuelas de arte son muy agradables.
Me veo siendo una bisabuela en la graduación de mi bisnieto de una escuela con mi nombre.
La religión es obligatoria en las escuelas inglesas, sabes.
Cuando estaba en la escuela secundaria, los profesores votaron que yo sería el estudiante con más probabilidad de acabar en la silla eléctrica.
Mi idea de romance es muy vieja escuela.
Nunca busqué ni obtuve ventajas personales en la escuela o en solicitudes de empleo en base a mi herencia.
Definitivamente me molestaron y abusaron en la escuela primaria.
Si son amigos de la vieja escuela que mis padres conocen, entonces puedo permanecer afuera hasta tarde. Pero si no los conocen, quieren que esté en casa a las 9 P.M. Si tengo trabajo, yo no tengo una fecha límite. No discuto con ellos. Así fui criado y estoy felíz con eso.
Crees que la escuela termina cuando termina, pero no lo hace.
Debatí entre la escuela de leyes y la divinidad.
Nada podría ser tan duro como la escuela secundaria.
Si vieras hacia atrás, al niño de escuela que yo era, verías a una persona tan callada como un ratón de iglesia.
La vida es una escuela de probabilidad.
Estaría satisfecho sólo haciendo entrenamiento en la escuela secundaria. Rechazé un número de universidades cuando yo enseñaba en South Bend, Indiana, antes de ir al servicio. Sinceramente, creo que si yo no hubiera alistado en el servicio, yo nunca habría dejado la enseñanza secundaria. Estoy seguro que nunca habría partido.
Casas de escuela no enseñan a sí mismas — montones de ladrillos y mortero y maquinaria no envian a los hombres. Es el alma humana, capacitada y viva, cultivada y esforzada por largo estudio y pensamiento, que respira el verdadero aliento de vida en los niños y las niñas y les hace ser humano, ya sean negros o blancos, griegos, rusos o americanos.
