Siempre miro hacia adelante, no hacia atrás.
He tomado mis propias decisiones desde que murió mi padre.
Sólo sé lo que en los periódicos leo.
No tengo tiempo para estar deprimido.
No sabía qué era no trabajar duro de pequeño.
Nunca tuve tiempo para soñar con ser alguien más.
Ser primera dama es el trabajo no remunerado más difícil del mundo.
Amo a mi esposo. Creo en él, y me siento orgullosa de sus logros.
Nunca tengo rabietas. Si algo me molesta, me quedo en silencio. Si no estoy hablando, déjenme solo.
Tengo una perspectiva muy positiva.
Lo hago o muero, pero nunca lo cancelo.
La verdad me sostiene.
Se necesita corazón para estar en la vida política.
Creo que una persona tiene que ser solo ella misma.