No hay infieles norteamericanos en Bagdad. ¡Nunca!
Los encerramos dentro de la ciudad. Sus alrededores están bloqueos.
Hoy en día, la marea se ha vuelto, los estamos destruyendo.
Washington ha lanzado a sus soldados al fuego.
Nuestra evaluación inicial es que todos morirán.
Los recibiremos con balas y zapatos.