Un jardín debe combinar lo poético y lo misterioso con una sensación de serenidad y alegría.
Creo que el espacio ideal tiene que contener elementos de magia, serenidad, brujería y misterio.
Yo no divido a la arquitectura, el paisaje y la jardinería; para mí son uno solo.
Mi casa es mi refugio, un pedazo emocional de la arquitectura, no un frío pedazo de conveniencia.
La vida privada de la belleza no es digna de ser llamada humana.
La belleza es el oráculo que nos habla a todos.