Citas de Juan XXIII
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Consulta no tus miedos sino tus esperanzas y tus sueños. No pienses en tus frustraciones, sino en tu potencial incumplido. Preocúpate no en lo que has intentado y fracasado, sino en lo que todavía es posible hacer y lograr.
Los hombres son como el vino: algunos se convierten en vinagre, pero los mejores mejoran con la edad.
La paz verdadera y sólida de las naciones consiste no en la igualdad de armas, sino solamente en la confianza mutua.
Suele suceder que me despierto por la noche y empiezo a pensar en un problema grave y decido que debo contárselo al Papa. Entonces me despierto por completo y recuerdo que soy el Papa.