Citas de Michel de Montaigne
(página 2)

Ordenar por fecha
Ordenar por calificación

No hay ningún deseo más natural que el deseo de conocimiento.

1

Si un hombre me insta a decirle el por qué lo amaba, siento que no puede ser expresado sino respondiendo: porque era él, porque era yo.

1

El que teme sufrir, ya padece lo que teme.

1

Las almas bellas son aquellas que son universales, abiertas y listas para todas las cosas.

1

No me interesa tanto lo que soy para los demás como lo que soy para mí mismo. Voy a ser rico por mí mismo y no por préstamos.

3

Haz tus leyes educativas estrictas y las criminales pueden ser suaves; pero si le dejas a la juventud su libertad tendrás que construir calabozos durante siglos.

1

Si un hombre debe importunarme de darle una razón por qué lo amaba, creo que de lo contrario no podría serse expresado, que por dar como respuesta: porque era él, porque era yo.

1

El humor es un arma peligrosa, incluso para el poseedor, si él no sabe usarla discretamente.

3

No hay placer para mí sin la comunicación: no hay tanto como un pensamiento alegre que viene a mi mente que no me haga sufrir por haberlo producido solo, y que no tengo a nadie para decirle.

1

Tal vez no haya más evidente vanidad que escribir de ella tan vanamente.

2

Permitamosle a la naturaleza que se salga con la suya. Ella entiende su negocio mejor que nosotros.

1

Es una cosa monstruosa lo que voy a decir, pero lo diré igual: encuentro en muchas cosas más restricción y orden en mi moral que en mis opiniones y mi lujuria menos depravada que mi razón.

3

Hay una especie de gratificación en hacer el bien que nos hace regocijarnos con nosotros mismos.

2

Propuse ideas sin noción y sin resolver, así como lo hacen aquellos que publican preguntas inciertas para debatir en las escuelas, no para establecer la verdad, sino para buscarla.

1

Un remo recto parece curvo en el agua. No importa sólo ver el objeto, sino cómo se ve.

2

El matrimonio, un mercado donde nada es gratis sino la entrada.

1

La codicia es el principio y el final del alfabeto del diablo — el primer vicio corrupto de la naturaleza en moverse, y el último en morir.

1

La ambición no es un vicio de mentes pequeñas.

1

En nueve vidas nunca sabrás tanto sobre tu gato como tu gato sabe acerca de ti.

2

La manera de actuar del mundo es hacer leyes, pero seguir costumbres.

1

Temas aleatorios y páginas de autores

Política de Privacidad